viernes, 18 de septiembre de 2009

Mi bebida


MI BEBIDA (Redacción I)


Yo no tengo una bebida favorita en específico, son varias. Los hermanos de mi mamá me pegaron la manía de “las bebidas alcohólicas” como la Caribe-Cooler, el pulque y el dichoso “Clamatto”, que con unos cuantos hielos, en época de calor, es una bendición. Una ocasión cuando toda mi familia y yo fuimos de campamento a Atlixco, uno de mis tíos me compró 7 Caribe-Cooler para mí sola, pero hacía tanto calor que me las acabé ese mismo día (ja buen pretexto). De vez en cuando me tomo una de durazno, mi sabor favorito. No bebo seguido porque tomo medicina para mi problema de la vista, y prefiero evitar una extraña combinación en mi sangre y que al rato me haga daño.
El pulque riquísimo bien frío. Según yo sé, al tomar un trago, hacer buches, escupirlo al piso, y si cae en forma de escorpión significa que es pulque de buena calidad. Esos pulques curados que venden en los pueblos son una verdadera delicia, en especial el de fresa. Cuando era pequeña, me tomé más de 2 litros, lo único que recuerdo es que comencé a hablar vagamente, y después me quedé dormida, según me dijeron mi tío y mi abuelita. A mis 19 años, recordar aquella anécdota me es muy gracioso, pues emborracharse con pulque a los 9 años es de valor para un niño de esa edad, y para alguien de mi edad es ridículo y pues también hasta cierto punto chistoso.
Otra bebida que me encanta es el “Clamatto”. Ese preparado de hielos, cerveza, juego de tomate y almeja, limón, salsa inglesa, jugo Magui, y una fina escarcha de sal, es excelente, y hace una fenomenal y refrescante combinación, simplemente irresistible.
Hay otras bebidas que también me gustan mucho, pero que son muy “sencillas”, como la sagradísima Coca-Cola, el refresco de manzana y el refresco de limón, son buenísimos bien fríos, porque de lo contrario, calientes y sin gas tienen un sabor fatal.
El agua de horchata es deliciosa, y de todas las aguas de sabor habidas y por haber, es mi favorita. Es muy rica hecha de forma “natural”, con arroz, canela, vainilla, azúcar, leche evaporada y un poco de leche condensada; aunque también sabe buena cuando se hace con jarabe pre-fabricado. A diferencia de la natural, la que se hace con jarabe tiene un sabor químico… por eso prefiero la otra.
Por último, las malteadas de chocolate con helado, acompañadas de galletas, son toda una alegría al paladar. Nunca en mi vida me cansaré de tomar leche con chocolate, y por lo que sé, la leche proporciona calcio… vaya que sí lo necesito. De preferencia, siempre tomo mi leche bien fría y con puro chocolate, porque si le echo azúcar, al rato tanto dulce me hostiga demasiado.
En fin, no tengo una bebida predilecta, pero las ya antes mencionadas le proporcionan a mis días un singular toque de alegría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario